"Cuando me vaya no quedará nada de mi
me mezclare con la tierra, el único dios verdadero.
Pero el eco del amor que di y que recibí
Gritará como hermoso ruido para siempre”
Pablo López – Hijos del amor y la libertad.
«Hay palabras que oran, que unen, que tocan,
que restauran, que mueven , que levantan
que inspiran y elevan y te lloran y emocionan.
Tienden puentes.
Hay poetas vivos en la música de las esferas.
Hay seres luminosos y extraordinarios que han rodeado su humildad de los contornos circulares del infierno de las dudas, del fracaso, de la locura, de la perdida, del “paro y con lo que siento avanzo”.
Hay personas que sienten y aman como eje de su sol y libertad. Que viven sin guión y de su métrica nacen las más bellas palabras. Hacen de la hermana duda su no se, su sencillez y autenticidad.
Hay rastreadores de sueños y metas tras las huellas de la coherencia y el talento. De la sinceridad y honestidad con uno mismo. Cazan emociones y agradecen a su propia presa su fuerza, su valor y vulnerabilidad.
Hay masacradores de sueños, sus armas son los muros. Los “ahí no pasas”, la lucha, el juicio, lo que callan. Dividen. Juzgan, amenazan y sentencian. Interpretan, filtran y rabian…
Hemos venido a expresar nuestra verdadera naturaleza. Es única
Al seguir adelante para manifestarla preservamos el orden y equilibrio perfecto del universo.
Necesitamos la luz y la sombra en nosotros mismos, y verla fuera para integrarla. El éxito y el fracaso. A un prodigio constructor de sueños con maravillosas canciones. A un índigo cínico matasueños….
Agradezcamos las esfinges, sin ellas tal vez no se alcance la gloria.
Pero si la libertad…de poder ser lo que hemos venido a Ser.
Swaranita, 18 Enero 2018.
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